Fue el mazo de cartas de Tarot más utilizado hasta la popularización masiva del Tarot Rider-Waite.
Según los estudiosos del tema, este Tarot fue inventado en Italia en el siglo XV e introducido en el sur de Francia por los franceses que conquistaron MIlán y el Piamonte en 1499. Mientras el juego declinó notablemente en Italia creció enormemente en Francia. Tanto que en adelante ha sido y sigue siendo conocido como Tarot de Marsella, aunque no fuera concebido allí.
Los dibujos son de tipo medieval y parecen tener una gran influencia de las vidrieras góticas. Los colores de las cartas corresponden a colores simbólicos como podrás ver en las descripciones de los Arcanos. Mientras los Arcanos Mayores están diseñados con dibujos bastante definidos, los Arcanos Menores tienen muchos menos detalles, lo cual hace que tengas que conocer a fondo la numerología para poder interpretarlos. Eso, entre otras cosas, hace que el Tarot Rider sea el preferido para los principiantes en la lectura del Tarot, ya que se pueden apoyar en las imágenes con mayor facilidad.
Mientras sus predecesores Tarots italianos contienen un menor número de cartas, el de Marsella es el más completo con sus 78 cartas en total: veintidós para los Arcanos Mayores y cincuenta y seis para los Menores.