Tarot Mantegna

El llamado Tarot de Mantegna está hundido en el misterio ya que no parece muy claro que fuera un verdadero Tarot ni para juego ni para adivinación. También se llama Tarot al estilo Mantegna y Tarot Baldini. Esto es debido a que se conservan dos series diferentes de este conjunto de cartas o tarjetas: la serie E y la serie S.

Está prácticamente admitido por todos los historiadores que Andrea Mantenga, pinto italiano del siglo XV y que le da su nombre, no fue, en realidad, el autor de dichos diseños, aunque ese nombre haya quedado para la posteridad.

Probablemente uno de los artistas de una de las series fuera el Maestro grabador florentino Baccio Baldini. Aunque tampoco se puede afirmar con seguridad. Por eso se suele nombrar simplemente como el Maestro de la serie E o el Maestro de la serie S. Lo único que es seguro es que son de estilo italiano y de esa época.

La confusión viene cuando este, vamos a llamarlo mazo, contiene una parte de los Arcanos Mayores que combina con otras imágenes y figuras que nada tienen que ver con ningún otro tarot conocido. Esto ha llevado a los estudiosos a creer que, en realidad, eran láminas destinadas a la enseñanza de los niños de las clases pudientes.

Todas las tarjetas tienen un borde simple, una imagen grabada y el nombre y el número grabado en números romanos. Se agrupan en 5 bloques de 10 grabados:

– Del 1 al 10: las condiciones sociales o espirituales del hombre, desde el mendigo hasta el Papa.

– Del 11 al 20: las nueve Musas y Apolo

– Del 21 al 30: las siete artes liberales a las que añaden la filosofía, la poesía y la teología.

– Del 31 al 40: Los Genios de la Luz, el Tiempo, el Sol y el Mundo y las siete virtudes

– Del 41 al 50: los siete planetas tradicionales de la astrología, una octava esfera que representa las estrellas fijas y dos conceptos, la primera causa de movimiento y la causa primera (Dios)

 El conjunto completo es un modelo humanístico del Cosmos tal y como se concebía en el Renacentismo. La letra “E” del primer grupo, para “Estates” (Estados del Hombre) en italiano y la letra “S” para “Estaciones”. De ahí salen los nombres de las dos series.

No se tiene constancia de que en algún momento hayan sido utilizadas con los mismos fines que el Tarot, pero sí de que algunos estudiosos y artistas como Alberto Durero, por ejemplo, hicieran sus propias copias y reconstituciones.

En definitiva, a falta de otros descubrimientos el Tarot de Mantegna no se puede considerar una verdadera baraja de Tarot.

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