“Venida de los tiempos más remotos, desde los constructores de las pirámides a los constructores de las catedrales, pasando por las corporaciones tirias y judaicas, los collegia grecorromanos y las cofradías medievales, la masonería operativa ha estado siempre dirigida por misteriosos filósofos, que le adjudican la tarea de transmitir, conscientemente o no, lo esencial de una técnica iniciática muy precisa.
En efecto, se advierte siempre en el pasado la existencia de una iniciación, vinculada a los oficios, que en francés se ha convenido en llamar métiers.
La palabra viene del término latino ministerium, que significa “oficio”, “ministerio”, “servicio”, y esta raíz nos conduce a una cierta sacralización de lo que se denomina también una profesión, voz emparentada con profeso, término con que se designa al que ha formulado votos y ha aceptado compromisos dentro de una orden religiosa o caballeresca.
Mucho antes de que diese nacimiento a la masonería especulativa, su gran hermana contemporánea, la masonería operativa había creado, ya en la Edad Media, un lenguaje simbólico, con imágenes plenas de sustancia, puesto que el pensamiento libre, conservado celosamente por cerebros elegidos, no corría el peligro de prostituirse.
Las antenas sutiles que la mente humana tiende a veces hacia el mundo misterioso de los arquetipos y los universales, captan con gran frecuencia conceptos cuyas imágenes fugaces se mantendrían difícilmente en el consciente del hombre si los símbolos, como pasarelas tendidas entre la carne y el espíritu, no permitiesen percibirlas, representarlas y traducirlas.
Pero el Homo faber contemporáneo apartó hace mucho tiempo de sus actividades profesionales esta vida de los símbolos … Ya se encargaron de separarlo de ella los medios que se preocupaban por su porvenir. Y en nuestros días, cada vez se pone más en duda la importancia y la utilidad de la parte de herencia operativa conservada por la masonería especulativa.
Digámoslo claramente, la francmasonería, en su conjunto, siguió el mismo descenso evolutivo que la Iglesia, su hermana gemela y rival.
El materialismo invadió los templos masónicos, se incrementó la mediocridad al aumentar el número, y lo que debía limitarse a una discreta tolerancia se convirtió en laxismo agresivo.
Como se ha dicho, la mentalidad moderna en sus múltiples aspectos no es otra cosa que el producto de una vasta sugestión colectiva, ejercida de modo continuado durante cerca de cuatrocientos años en todos los campos, religioso, político, familiar e individual, y tendente a cortar los lazos entre el hombre y sus raíces espirituales.
Las grandes religiones exotéricas –judaísmo, cristianismo, Islam tienen su parte de responsabilidad en esta decadencia, por su obstinación en querer imponer a las masas, en la actualidad ya advertidas, una serie de cuentos chinos. Y a las corrientes revolucionarias les resultó fácil sacar partido del materialismo, estúpido y egoísta, de las clases dirigentes.
Las páginas que siguen van dirigidas en primer lugar a los francmasones, pero también a todos aquellos que se inquietan por el mañana, que no da en absoluto la impresión de que vaya a ser feliz. A los primeros les toca en serio su papel de “constructores” en la sociedad del nuevo milenio.
Robert Ambelain “El Secreto Masónico”
La Francmasonería: Orígenes, Historia, Objetivos y Actualidad de una Sociedad Secreta
Introducción
La Francmasonería, también conocida como Masonería, es una antigua sociedad fraternal y secreta que ha capturado la imaginación y la curiosidad de muchas personas a lo largo de los siglos. Con sus rituales, símbolos enigmáticos y estructura jerárquica, la Francmasonería ha generado especulaciones y teorías conspirativas, pero también ha desempeñado un papel significativo en la historia y la sociedad. En este artículo, exploraremos los orígenes, la historia, los objetivos y la actualidad de la Francmasonería, brindando una visión más clara y comprensiva de esta misteriosa organización.
Orígenes de la Francmasonería
Los orígenes exactos de la Francmasonería son difíciles de rastrear debido a la falta de registros históricos precisos. Sin embargo, se cree que su nacimiento se remonta a las corporaciones de constructores medievales que eran responsables de la construcción de catedrales y otras estructuras arquitectónicas emblemáticas. Estas corporaciones, conocidas como gremios de albañiles, estaban formadas por personas con habilidades especializadas en la construcción.
A medida que las catedrales góticas se propagaban por Europa, los albañiles y arquitectos comenzaron a compartir secretos comerciales y técnicas de construcción. Estos conocimientos especializados se transmitirían oralmente y, para proteger sus secretos, los gremios de albañiles comenzaron a admitir miembros solo a través de iniciaciones rituales y juramentos de secreto.
A lo largo de los siglos, la Francmasonería evolucionó y removió elementos filosóficos y simbólicos de diversas fuentes, como la mitología egipcia, los misterios de Eleusis y la filosofía hermética. Estos elementos adicionales ayudarán a transformar la Francmasonería de una organización de albañiles en una sociedad secreta dedicada al desarrollo moral y espiritual de sus miembros.
Historia de la Francmasonería
La Francmasonería moderna tal como la conocemos hoy en día se considera que se establece en el siglo XVII en Inglaterra. En 1717, cuatro logias londinenses se unieron para formar la Gran Logia de Londres y Westminster, que se convirtieron en el punto de referencia para el desarrollo de la Francmasonería especulativa, centrada en la filosofía y la moral en lugar de la construcción física.
La Francmasonería se expandió rápidamente por toda Europa y América del Norte durante los siglos XVIII y XIX. Atrajo a personas destacadas de diversos ámbitos, incluidos filósofos, científicos, políticos y líderes empresariales. Muchos de los padres fundadores de los Estados Unidos, como George Washington y Benjamin Franklin, fueron masones destacados.
Durante el siglo XVIII, la Francmasonería estuvo vinculada a los ideales de la Ilustración y los principios de la Revolución Francesa. Promovía valores como la igualdad, la libertad y la fraternidad, y se convirtieron en un espacio donde las ideas progresistas y la búsqueda del conocimiento se promovían y compartían.
A lo largo de su historia, la Francmasonería ha experimentado diversas etapas y corrientes. Durante el siglo XIX, surgieron diferentes ramas y obediencias masónicas con enfoques y filosofías distintas. Algunas se centraban en el esoterismo y la herencia simbólica, mientras que otras se orientaban más hacia la filantropía y el trabajo social.
Sin embargo, la Francmasonería también se ha enfrentado a críticas y controversias a lo largo de su historia. En algunos momentos, ha sido acusada de secretismo excesivo y de estar involucrada en conspiraciones políticas. Estas sospechas, en parte, han contribuido a la explotación de teorías de conspiración y la percepción negativa en algunos sectores de la sociedad.
Objetivos y Valores de la Francmasonería
Los objetivos y valores de la Francmasonería han evolucionado a lo largo del tiempo y varían entre diferentes logias y obediencias. Sin embargo, hay algunos principios generales que suelen estar presentes en la mayoría de las ramas de la Francmasonería:
- Fraternidad y hermandad: La Francmasonería promueve la unión y el compañerismo entre sus miembros. Se enfoca en construir relaciones basadas en la confianza, la solidaridad y el respeto mutuo.
- Buscar el conocimiento y la sabiduría: La Francmasonería fomenta el aprendizaje continuo y la búsqueda de la verdad. Se anima a los masones a cultivar su intelecto y expandir sus horizontes a través del estudio de la filosofía, la historia, las ciencias y las artes.
- Ética y moralidad: La Francmasonería promueve principios éticos y morales elevados. Sus miembros se comprometen a vivir de acuerdo con valores como la honestidad, la integridad, la justicia y la benevolencia. Se busca el desarrollo personal y la mejora de la conducta moral en la vida cotidiana.
- Tolerancia y libertad de pensamiento: La Francmasonería defiende la libertad de pensamiento y la tolerancia hacia las diferentes opiniones y creencias. Se considera un espacio donde los masones pueden discutir y debatir ideas libremente, sin juicio ni prejuicio.
- Filantropía y servicio a la comunidad: La Francmasonería se involucra en obras de caridad y servicios comunitarios. A través de iniciativas filantrópicas, los masones trabajan para mejorar la calidad de vida de las personas y contribuir al bienestar de la sociedad en general.
- Actualidad de la Francmasonería
- En la actualidad, la Francmasonería continúa existiendo en todo el mundo, con logias y obediencias presentes en numerosos países. Aunque ha experimentado un declive en la membresía en algunas regiones, sigue siendo una sociedad activa y relevante para muchos de sus miembros.
- La Francmasonería moderna ha evolucionado para adaptarse a los cambios sociales y culturales. Se ha vuelto más inclusiva en términos de género y religión, abriendo sus puertas a mujeres y personas de diferentes creencias religiosas.
- Además de sus rituales y reuniones internas, la Francmasonería también se ha comprometido a ser más transparente ya participar en diálogos públicos. Muchas logias organizan eventos abiertos y programas educativos para proporcionar información sobre sus principios y actividades.
- En cuanto a su influencia política y social, la Francmasonería ya no tiene la prominencia que tuvo en el pasado. Aunque algunos masones pueden ocupar cargos políticos o desempeñar roles destacados en la sociedad, la Francmasonería en su conjunto no tiene un objetivo político o ideológico específico. Se enfoca principalmente en el crecimiento personal, el compañerismo y la contribución al bienestar de la comunidad.
Conclusión
La Francmasonería es una sociedad secreta que ha existido durante siglos, desempeñando un papel significativo en la historia y la cultura. Aunque sus orígenes exactos siguen siendo un misterio, se cree que se desarrollará a partir de los gremios de albañiles medievales.
La Francmasonería ha evolucionado a lo largo de los siglos, adoptando elementos filosóficos, simbólicos y éticos en su práctica. Sus objetivos se centran en la fraternidad, la búsqueda del conocimiento, la moralidad y el servicio a la comunidad.
En la actualidad, la Francmasonería sigue siendo una sociedad activa y relevante para muchos de sus miembros. Ha promovido la inclusión y la transparencia, y se ha adaptado a los cambios sociales y culturales. Aunque ya no tiene la misma influencia política que en el pasado, sigue siendo un espacio de encuentro y crecimiento personal para quienes buscan pertenecer a esta misteriosa y fascinante sociedad secreta.